En aclarar si, como han dicho los abogados de Bárcenas, este se ha servido de la Amnistía Fiscal decretada por Rajoy para blanquear 10 millones de euros.
En aclarar si, como se ha publicado, el PP ha tenido durante años una contabilidad en B de la que pagaba suculentos sobresueldos en sobres de dinero negro.
Pero lo que realmente hizo el día después, fue servirse de su mayoría absoluta, para eludir ir al Parlamento a dar las explicaciones urgentes que nos debe a los ciudadanos por este escándalo.
Sus deseos de transparencia se agotan en esas AUTOAUDITORÍAS (en el plazo de un año), lo cual es una auténtica tomadura de pelo.
¿Van a reconocer que tienen o han tenido contabilidad B?
¿Se la van a enseñar a la auditoría externa para que les pueda inculpar?
Rajoy defendió a Bárcenas a capa y espada y lo mantuvo más de un año, desde que se supo su imputación en el caso GÜRTEL.
Cuando finalmente Bárcenas abandonó el partido, el PP emitió un comunicado, haciendo reconocimiento público de su magnífica gestión como Gerente y como Tesorero y agradeciéndole la lealtad.
Rajoy dijo: “Nadie podrá demostrar que Bárcenas no es inocente” en abril de 2009.
Lo que ahora dice Cospedal deja muy mal parado al propio Rajoy.
El PP ha dificultado todo lo que ha podido que la investigación judicial sobre Bárcenas llegara a donde ha llegado.
Desde que estalló el caso GÜRTEL lo único que ha hecho el PP ha sido intentar dificultar el avance de la investigación judicial. Atacando y poniendo en duda la legitimidad del Juez Garzón y acusando al Gobierno del PSOE.
Cospedal acusó a Alfredo Pérez Rubalcaba, de “crear un estado policial” para perseguir al PP.
Cuando ha estallado algún caso de corrupción en un partido político -PSOE, CIU,...-, la estrategia del PP ha sido siempre centrar el foco del ataque político sobre el partido en cuestión y situar la exigencia de responsabilidades en el máximo nivel.
Pero, cuando el caso de corrupción afecta al corazón mismo del PP, intentan fijar la idea de que es un problema que afecta por igual a todos los partidos.
Rubalcaba ha dicho: “Esta vez, no. No lo vamos a consentir”.
“Hace muchos años que el PSOE aprendió la lección y no lo olvidamos”.
José Carracao.
