El Tesorillo vence al Pastores en el derbi

Los locales ofrecen su mejor cara con diez hombres (3-0). Los algecireños no bajan la guardia pero se quedan sin premio.
La UD Tesorillo venció en un insípido derbi a la UD Pastores.

Los dos equipos jugaron con ánimo pero sin un extra de motivación que hace distintos estos partidos.
Era más la dignidad profesional que conservan algunos futbolistas que los tres puntos en cuestión. En parte, porque los algecireños están a un abismo de la salvación y los tesorilleros dejaron hace semanas de sentirse favoritos para el ascenso.

Aún asi, el partido dejó detalles, cinco goles y una pizca de emoción al final.

El Pastores saltó al césped de la Era con el chip cambiado de las últimas semanas, que no le habían dejado buenos resultados pero sí excelentes sensaciones. Y es que los de Javier Ventura le entregaron el balón al Tesorillo, que disfrutaron de una posesión mayor, aunque no crearon grandes ocasiones. Por parte algecireña, la contra fue la única arma, pero sin munición.

La reanudación de la segunda mitad dejó el primer gol. Una falta directa a favor del Tesorillo lanzada por Jorge Pirri con más sutileza que fuerza fue interceptada por el debutante Amador, que despejó y Kike ante la pasividad de la defensa empujó al fondo de la red. Fue un tanto valioso, porque en la misma acción, el gaditano Javi Torres decidió auto expulsarse del encuentro por una niñería.

Con el resultado en contra y un jugador más, el Pastores buscó voltear el marcador. Adelantó a Corrales al área opuesta de su hábitat natural y pretendió la remontada con mucho desorden y corazón. Los locales ante un rival adelantado, marcaron por mediación de Javi Chico. Posteriormente se sucedieron varias ocasiones locales ante el desconcierto de los algecireños, que fueron malogradas incomprensiblemente. La velocidad de Juanito inquietó a los tesorilleros pero no batió con todo a su favor. El que sí lo hizo y firmó el mejor tanto de la tarde fue Jorge Pirri, que aprovechó un despeje de la defensa visitante para fusilar sin contemplaciones y poner el tercero.

Pero el Pastores no merecía una goleada tan abultada. Corrales hizo de asistente para que el juvenil Álava marcara en el 86'. Posteriormente, Juanito, ya en el 94', puso la cabeza en un balón llovido que contempló la defensa como el que precisamente ve llover e hizo el segundo. Demasiado tarde. Sin tiempo para la heroica.
Publicado por Alvaro Moya para Europa Sur.