Ellos Tarzán, nosotros Chita... por Oscar Lobato.

ELLOS son listos, muy listos. Usted y yo, unos pringaos. Mira que entramparnos de por vida en un piso que se mide en nanómetros cuadrados. ¡Home, po favó! Por casi la mitad de lo que nos saldrá a nosotros la broma, ellos se feriaron un chalet de sopocientos metros construidos, más parcela. Ellos Tarzán, nosotros Chita.

Oído al parche. Ellos trincaron una finca rural en Tontolaba de Mar y levantaron casitas pocholísimas, a menos coste que ponerle ascensor a un edificio de renta antigua. Se hicieron su jardincito, su piscinita, su bodeguita, su canchita de tenis... Sin pegas. Ahí estaba ese alcalde y sus compis, los barones del ladrillo.

¿Licencia de obra? Manteca al mandamás de turno y los mandamenos de la oficina técnica. ¿Alta de luz sin boletín? ¡Si la acometida es para el pozo! Esto es zona agrícola y mis bromelias se amustian raudo. ¿Escrituras? Eso me lo arregló un arquitecto, que edificó una fortuna, y un notario que daba fe, esperanza y hasta caridad, si la pila de billetes era lo bastante alta. ¿Piscina ilegal? ¡Cá, una alberca de riego! Uno de Confabulación Hidrográfica, yihadista puro, de lo que quiere a los binladen. Y nosotros venga a pagar hipoteca, tasas y supertasas.

En estas, el Parlamento Europeo sale con un informe sobre corrupción urbanística en España. "¡Se acabaron los fondos comunitarios!", chilla la Eurocámara. No es para tanto. Si apenas son 42.000 viviendas ilegales, sólo en Andalucía. Y bien que construyeron aquí galos, germanos y sajones lo que no les dejaron en su país.

Pero ahí, los listos han estado finos; ilegales los otros. A ellos, que les pongan alcantarillado, dispensario, semáforos, les asfalten calles y saquen los carteles de vía pecuaria de sus avenidas. Si el alcalde busca repetir, ya sabe, a gastarse parné aquí. A los de los barrios legales que les den. Ellos Tarzán y nosotros Chita… callando.
Oscar Lobato, hoy en Diario de Cadiz.

Foto:Tiojimeno.