No pudo ser. El Barcelona se quedó fuera de la final de la Champions al no poder derribar el muro preparado por Mourinho pese a que el Inter de Milán jugó con diez desde el minuto 28 por expulsión de Motta. Piqué, en el 83', dio vida a los de Guardiola con un golazo, pero no fue suficiente para remontar el 3-1 de la ida.