Agentes de la Guardia Civil pertenecientes al Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) han denunciado a los propietarios de dos fincas, ubicadas en los municipios campogibraltareños de Castellar y Jimena de la Frontera, por llevar a cabo supuestas prácticas de caza furtiva.
La Guardia Civil informó a través de un comunicado que la primera actuación se realizó en la finca de La Almoraima (Castellar) en el transcurso de las habituales inspecciones por zonas susceptibles de uso métodos de captura prohibidos. La patrulla localizó diez lazos, por lo que el coto donde se encontraban fue denunciado por negligencia en la vigilancia. Los lazos son un método de caza prohibida en el que se coloca un lazo al paso del animal para capturarlo cuando se adentre.
La segunda actuación se desarrolló en la vecina localidad de Jimena de la Frontera cuando, al realizar inspecciones en instalaciones ubicadas en la zona de barranco Jimenato, los agentes del Serpona encontraron en una cuadra cinco especies silvestres: dos cabezas de ciervo, otras tantas de corzo y una de gamo, todas naturalizadas.
En una segunda cuadra se localizó una cabeza de ciervo en estado cadavérico, así como perros de caza sin la documentación preceptiva, ya que la tenencia de estos animales debe de ir amparada con la documentación sanitaria e identificativa y, si sobrepasa los 16 canes, debe de ir amparada con licencia de caza con rehala.
De esta forma, se realizaron sendas denuncias administrativas a los propietarios de las especies de caza naturalizadas y en estado cadavérico, por no poseer la documentación que ampare su legal procedencia, así como por poseer perros de caza sin documentación.
FUENTE: EUROPA SUR