Los escalones que bajan del Paseo al Hogar de los Pensionistas está sufriendo estos batacazos porque nadie, pero nadie, hace caso a la destrucción paulatina pero evidente que ocurre a diaro en esta zona tan emblemática del pueblo. Si bien el muro está en pésimas condiciones y necesita reparación urgente, tampoco le hace falta ninguna ayuda para terminar derribado del todo.
Alberto Bullrich