Segundo caso de meningitis en menos de un mes. Esta vez se trata de una niña de 16 meses que ingresó el pasado miércoles alrededor de la una de la madrugada en el servicio de urgencias del hospital Punta de Europa con fiebre y malestar general. La menor llegó derivada desde su centro de salud, y ante la sospecha de los médicos que la atendieron de que se tratara de otro caso de meningitis, le realizaron las pruebas pertinentes, entre ellas una punción lumbar. Finalmente, los resultados confirmaron ayer que se trata de una meningitis tipo B.
Actualmente la pequeña se encuentra estable y está recibiendo el tratamiento protocolario para combatir la enfermedad. Según pudo saber este diario, la niña responde favorablemente al tratamiento, que durará entre una y dos semanas, tiempo que varía sobre todo en función de la resistencia del germen causante de la enfermedad, el meningococo B.
Respecto al entorno de la menor ya se ha activado el protocolo habitual. Al ser un bebé es más fácil controlar con quién ha estado en contacto. De hecho, personal sanitario acudió ayer mismo a poner en aviso a la guardería a la que acude la afectada para informar a los padres de los niños de la situación. Tanto los familiares de la niña, como los compañeros de guardería y los empleados empezarán a tratarse con quimioprofilaxis, lo habitual en estos casos, como medida preventiva.
Fuentes sanitarias aseguraron que este caso no está de ninguna manera relacionado con el de la menor de 17 años que falleció el miércoles en el hospital Punta de Europa a causa de meningitis tras permanecer dos semanas ingresada en la UCI. Las menores no se conocían ni tampoco vivían en la misma zona, por lo que desde el área sanitaria se descarta la existencia de un brote. Además, según aseguraron las fuentes, es frecuente que se den casos de meningitis en esta época del año.
Por otro lado, este diario pudo averiguar que la madre de la menor de 16 meses ingresada ha sido denunciada por supuestamente agredir a una pediatra del hospital. La mujer y su marido estaban discutiendo en mitad del pasillo cuando la profesional se acercó a ellos para pedirles que bajaran la voz.
La pediatra, al estar afónica de manera puntual, les hizo señas con las manos a ambos para que bajaran la voz, a lo que la madre supuestamente reaccionó mal y la agredió.
