Dos semanas, desde que iniciara las conversaciones con el Algeciras, ha tenido que esperar Francisco Javier Mateo Vera para recibir la baja del Balón de Cádiz (segundo filial amarillo), y poder aterrizar en la entidad albirroja. Dos semanas que han tenido en vilo al jugador, a los rectores del Algeciras y a la afición, que ve como finalmente, el portero jimenato formado en la cantera algecirista regresa a su club de origen, a su casa. Su fichaje viene a confirmar lo que Europa Sur ya anunció a primeros de este mes: Mateo ya es rojiblanco.
Mateo estuvo en la cantera albirroja cuatro años, llegó en 2007 al juvenil, equipo con el que ascendió a la División de Honor. De ahí, se marchó a Cádiz para formar parte del filial, y recibió ficha del Balón de Cádiz de la Primera Andaluza, el segundo filial cadista. También jugaría en Tercera con el Cádiz B. El de Jimena alberga desde siempre el sentimiento rojiblanco y considera al Algeciras "un gran club en el que me gustaría seguir aprendiendo. Vengo con mucha ilusión y estoy deseando volver a jugar en el Mirador y más aún en el año del Centenario. Me emociono cuando pienso en volver a ver a la gente, el campo, la afición...". Y es que, aunque "me trataron muy bien en Cádiz", dice Mateo, el joven guardameta quería cumplir un deseo, formar parte de la plantilla de "un primer equipo. No es que no me gustara el filial, pero por la edad que tengo, hay que seguir creciendo, y qué mejor sitio que Algeciras".
Leído en Europa Sur.