Que alegría cuando estás de sederismo y te encuentras con estas vírgenes.
Yo siempre le pido lo mismo: ¡Virgencita, déjame como estoy! El Niño Las Torres.
Que alegría cuando estás de sederismo y te encuentras con estas vírgenes.
Yo siempre le pido lo mismo: ¡Virgencita, déjame como estoy! El Niño Las Torres.