Ahora al ratón (obrero) como presa del gato (capitalismo) intentará hacer lo posible para que no se lo coma. Observando como actúan las presas en la naturaleza ante sus depredadores al ratón le queda cuatro opciones.
1º - Camuflase en su entorno para ser algo más de la naturaleza y así que el gato no se fije en él, extrapolando esta situación, la clase trabajadora tendrá que adatarse al mercado laboral es decir; si un asiático hace una prenda u objeto por un euro los trabajadores europeos también lo tendremos que hacer, todos sabemos como conseguirlo, más horas de trabajo y por menos dinero la hora.
2º - Cerrar la madriguera para que el gato no pueda meter las garras, extrapolando a la sociedad, esta tendrá que hacerse nacionalista y Europa tendrá que cerrar sus fronteras a los productos exteriores con mucho aranceles para que su precios se igualen a los productos europeos.
3º - Enfrentarse contra el gato y así la presa se convierte en depredador y viceversa, cada cien ratones que lo hacen 99 mueren en el intento, pero en alguna vez no ha sido así. En La Revolución Francesa el ratón de la burguesía se comió al gato de la Nobleza y otra fue la Revolución Bolchevique Rusa donde el ratón del proletariado se comió al gato de la burguesía.
4º - Por último, que ratón se haga amigo del gato, situación muy difícil pero no imposible si comparte mutuamente el peligro de la subsistencia.
Nos quedan unos años que vivir muy difíciles, he vivido las crisis de los 70 y la de los 90 y esta no se parece en nada, dicen que esta es muy parecida a la de los años 30 y espero que se equivoquen, todos sabemos como finalizó, y mi gran esperanza la deposito en que el ratón y el gato sean amigos y encuentren las soluciones en esa amistad.
E.Alonso
