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| Foto: Archivo TJD |
La carretera que une la barriada de La Almoraima con el casco urbano de Castellar tendrá a partir del jueves dos resaltos en la calzada para reducir la velocidad del tráfico.
Personal de la concejalía de Obras y Servicios del Ayuntamiento tiene previsto comenzar hoy, martes, con los trabajos y dejarlos rematados el miércoles. Durante esas dos jornadas, el tráfico permanecerá cortado en la carretera y derivado por otras calles con el fin de que la obra -con un coste estimado de unos 1.000 euros ejecutados con fondos propios- fragüe.
En esta vía el límite de velocidad es de 50 kilómetros por hora. Sin embargo, al tratarse de una carretera relativamente despejada al tráfico la velocidad de buena parte de los usuarios es sensiblemente superior. "Se trata de una carretera que la gente utiliza mucho para pasear. Además, es también la zona del carril ciclista que viene desde la Estación de San Roque. Sin embargo, ya son varios los coches que se han salido en una de las curvas por ir a una velocidad inadecuada. La última vez, el coche que se accidentó pasó por encima de un banco que, afortunadamente, no estaba ocupado", explicó el alcalde, Juan Casanova, quien se mostró partidario de invertir en prevención.
"Hemos elegido reductores de velocidad de obra frente a otras opciones como el plástico o caucho porque resultan menos ruidosos en su uso, son más duraderos y cumplen perfectamente con el objetivo de reducir la velocidad", expuso el regidor castellarense.
