Sr Pedro Corbacho cuando leo sus artículos de opinión o sus comentarios me turba y solo cuando ha pasado cierto tiempo soy capaz de que desaparezca mi confusión y sea capaz de analizar y expresar algo coherente sobre sus artículos. La primera vez que usted me turbó fue cuando se definió como trabajador afiliado a Comisiones Obreras y con una ideología política del P. Popular. Es decir: Es usted un obrero de muy de izquierda que defiende el liberalismo o el neoliberalismo como sistema que rige en las relaciones entre los obreros y el Capital. Tiene usted que reconocer que pertenece a una especie muy rara en el mundo laboral.
Aunque usted me turbe, no quiere decir que no reconozca su valor y mérito cuando reconoce y dice cosas como la anterior o las que usted dice en su último artículo de opinión. Ha tenido usted el valor de poner las piezas de la partida de ajedrez que se está jugando entre el P. P de Tesorillo y el P. P de Jimena en su sitio y de forma visible para los votantes de su partido.
En un momento no muy lejano, tanto el Partido Popular como sus votantes tendréis que salir en defensa de los intereses de Tesorillo capitaneados por Belén Jarillo o defender el Real Decreto de la Reforma de la Administración aprobado por el P. Popular. En esta partida quien gane será el futuro Rey del P. Popular en la próxima partida electoral.
Usted ha movido pieza, de una forma muy valiente y arriesgada, lo que no visualizo si ha sido un movimiento de sacrificio de pieza para salvar al Rey o tiene usted planteada la partida con todos los movimientos que terminará con jaque a la ficha de la Reina de Tesorillo.
Sabemos los dos, que pase lo que pase en esta partida, poco sirve que le diga que reconozco su valentía y el mérito de ser honesto, algo que no abunda en esta España querida, pero aunque no sirva de nada, usted me merece un respeto.
E. Alonso