Sr Corbacho:
Cuando usted habla en forma acusativo de la deuda que ha generado los gobiernos socialistas durante estos 35 años como el mal de todos los males; a esto, los ciudadanos que nos sentimos socialistas, decimos de forma sosegada, - a diferencia de otros - que tener una deuda no es deshonroso, porque no todo el mundo, incluidos los Ayuntamientos tienen capacidad de comprar las cosas a tocateja. “Yo he comprado mi casa, muebles y el coche con prestamos, si no fuera así, estaría viviendo de alquiler y con una bicicleta” el problema no es la deuda sino la capacidad que se tiene de generar recursos para pagarla, hasta la fecha así ha sido. La deuda actual con el plazo de amortización que le han aplicado como el tiempo de dos años de carencia, no la pagará su gobierno sino los siguientes, aunque sean socialistas.
El fondo de la cuestión es saber, si esa deuda ha sido generada porque algún regidor socialista la ha provocado en beneficio personal, en cuyo caso exijo que se denuncie y si es culpable que lo metan en la cárcel, o ha sido generada en beneficio de los ciudadanos de Jimena. Como ejemplo que usted pone de una deuda familiar: (Es distinto que un padre firme un préstamo con un banco para irse de borracheras y de adulterio, a que con el préstamo compre una casa, muebles o pague la matrículas de los estudios de sus hijos, aunque eso suponga que tenga que comer sopa de ajo el resto de su vida y atramparse para siempre) Si el actual Gobierno presume de transparencia, sería muy interesante que publicara los gastos e ingresos durante los años de Gobierno Socialista y que los ciudadanos juzgáramos la honestidad de la deuda y si esta fue o no irresponsable, yo tengo todo el tiempo del mundo para escuchar y leer páginas y paginas que se publiquen y si no lo hace, por pura ética debería de dejar de utilizar un argumento de fe, porque algunos solo le creeremos si metemos el dedo en la llaga.
Hablar de la deuda contraída de esa forma tan imperiosa, le puede generar un problema, si por causas de necesidad tuviera usted la necesidad de aumentarla. ¿Cómo la justificaría?
Quiero terminar diciéndole, que no tengo nada en contra de usted y de su Gobierno Local, más bien todo lo contrario, considero que situaciones difíciles como las que estamos viviendo, gobernar en un municipio es un reto muy bonito y al mismo tiempo penoso y serán los ciudadanos y no yo, los que valorarán vuestro trabajo. No seré él que ponga piedras en vuestro carro durante estos tres años que quedan, porque ustedes a no tener poder legislativo no pueden cambiar el rumbo social, por eso, mi total esfuerzo irá dirigido para que su partido a nivel nacional, con poder legislativo, legisle leyes que recojan los derechos humanos que fueron aprobados por la ONU (España es miembro y firmó esa carta de los Derechos Humanos). La mayoría de los Reales Decretos que están aprobando el P. Popular van en contra de dichos principios.
Saludos.
E. Alonso
