El Ayuntamiento de Castellar ha iniciado los trámites para crear una microindustria alimentaria polivalente en la que los vecinos del municipio puedan elaborar productos artesanales con todas las garantías sanitarias y permisos para su venta a terceros.
El alcalde, Juan Casanova (IU), explicó que la iniciativa surgió durante las recientes jornadas sobre soberanía alimentaria, donde numerosos vecinos plantearon su interés por elaborar productos como yogur, quesos, dulces, mermeladas o verduras envasadas con materias primas del municipio, pero que se encontraban ante un muro burocrático y económico para la obtención de los permisos sanitarios y la infraestructura necesaria.
La idea del Consistorio pasa por habilitar una nave municipal de 250 metros cuadrados ubicada junto al campo de fútbol como microindustria adaptada a la normativa que consiga el Registro Sanitario de Industria (RSI). "De conseguirse, los vecinos, agrupados como una cooperativa o como autónomos, podrían emplear las instalaciones públicas para transformar las materias primas y dar salida a los productos de forma que también se fomente el comercio y producción de proximidad. A fin de cuentas, generar valor añadido con las materias primas ya existentes", detalló. De hecho, en las jornadas se creó la asociación de consumidores y productores locales que podría servir ahora de catalizador para los vecinos interesados en utilizar las instalaciones.
Casanova y el arquitecto municipal ya han mantenido un primer encuentro con la jefa del distrito sanitario, María Josefa Fernández, para conocer los requisitos que debe cumplir la nave para obtener la homologación, así como la maquinaria y condiciones higiénicas requeridas. "El arquitecto ya está valorando el proyecto. Queremos que los pocos recursos que tenemos se empleen en proyectos que puedan generar empleo. La producción de alimentos artesanales puede ser una alternativa", defendió.