El documento que aporta datos económicos del periodo 2005-2012, señala que la Junta ha facturado por el canon un total de 22.840.784,50 euros para estas inversiones cuando, en estos momentos, su aportación sería de 6 millones de euros. En el desglose se muestra la liquidación realizada por el canon de la Confederación Hidrógráfica del Sur, que asciende a un total de 2.369.388,61 euros; y la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir aporta otros 3.423.159,11 millones. Finalmente, la facturación de la Junta a los ayuntamientos afectados y empresas de abastecimiento suponen 17.048.236,78 millones.
Frente a estas cuantías, las obras de modernización de los canales de riego suponen un coste de 30 millones y, según reza la Ley de Trasvase, la Junta tiene que aportar el 30%, es decir 9 millones, si bien las asociaciones de regantes de Tesorillo y San Pablo, están dispuestas a sufragar un 10% para agilizar el inicio, por lo que finalmente la Junta abonaría seis millones (20%). El 70% restante lo aportará el Ministerio de Agricultura a través de los fondos Feder.
Las comunidades de regantes del Guadiaro muestran en los últimos días su preocupación ante la falta de actuación de la Junta y el temor que los fondos europeos se pierdan. Por ello, en las últimas semanas, colectivos y ciudadanos de la zona han comenzado sus movilizaciones enviando sendas cartas a la presidenta de la Junta, Susana Díaz, y al consejero de la Presidencia, Manuel Jiménez Barrios, para que medien y desbloqueen el problema existente. La Junta no se ha pronunciado oficialmente sobre estas infraestructuras. En los encuentros con los afectados, estos han explicado que la Consejería de Medio Ambiente, indica que son obras de interés general. Los colectivos de agricultores explican la necesidad de acometer las mejoras en los canales que supondrán un impulso para el empleo con la creación de 160.000 jornales, en una comarca especialmente deprimida.