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Collado pedirá a la Diputación Provincial que ponga en marcha planes de empleo para el municipio
El regidor dice ser consciente de la necesidad de pactar todo con la oposiciónEl socialista Pascual Collado asumió el pasado sábado la Alcaldía de Jimena de la Frontera, cargo que ya desempeñó entre 2007 y 2011, y que recupera tras cuatro años de oposición al Partido Popular. Gobernará en minoría, con cinco ediles sobre un total de 13. Su investidura se desarrolló en medio de una alta incertidumbre ante la posibilidad numérica de un acuerdo entre IU y PP para dar la Alcaldía a la federación de izquierdas, lo que le hubiera apartado del cargo.
-¿Llegó a dar por perdida la Alcaldía aún siendo el partido más votado?
-Sí. Existía mucha incertidumbre que no se aclaró hasta el último momento. Llevaba dos discursos, el de oposición y el de gobierno. Tenía incertidumbre que se desveló en las mismas votaciones, fue lo positivo de la jornada.
-¿Cómo valora, por tanto, la decisión de los grupos de votar a sus respectivos candidatos? Le dejan gobernar pero no comparten su liderazgo...
-Hice un planteamiento para que se incorporaran las otras fuerzas políticas al gobierno. Nadie aceptó. Les pedía además que me dejaran gobernar como lista más votada, si bien era legítimo que hubiera pactos. Al final, el sentido común y esa petición que hice al resto de fuerzas se llevó a efecto.
-¿Qué fue lo primero que hizo el lunes al llegar al despacho?
-Más bien el domingo. Nos reunimos los miembros del grupo socialista para plantear el reparto de competencias y los primeros pasos de cada área. Estuvimos también preparándonos para el Pleno de organización y debatiendo sobre las iniciativas que son urgentes. El lunes ya vine para saludar al personal.
-Lo atípico del periodo entre las elecciones y la investidura, porque no se sabía claramente quién gobernaría, hizo que no se celebraran reuniones para el traspaso de poder. ¿Verdad?
-Exacto. Hoy martes -cuando se realizó esta entrevista- hemos tenido una reunión con el alcalde saliente, Guillermo Ruiz del Partido Popular, y con el secretario para repasar los asuntos pendientes. Se trata de cuestiones como pliegos de condiciones y adjudicaciones abiertas, temas de trámite que entre el anterior alcalde y el secretario ya me han puesto al día.
-Arranca el mandato y tiene usted un frente judicial abierto con el caso Gremio, que analiza supuesta prevaricación en pagos por el festival de música en su anterior etapa. ¿Le afectará?
-Confío en mi inocencia y en que será archivado. Los pasos que dimos en su momento fueron avalados por informes de la Diputación Provincial. Si no, no me hubiese presentado a las elecciones. Con esa confianza y trabajo honesto que hicimos, me vi capacitado para presentarme a las elecciones. El proceso está abierto ahora mismo. Cuanto más se dilate, más desagradable resulta.
-Si resulta procesado, el código ético de su partido dice que debería dimitir.
-Acataría las órdenes que marquen mi partido y el código ético. Llegado el momento, pondría mi cargo a disposición del partido. Lo mismo que el partido confió en mí para ser candidato, lo dejaría. Nosotros recurrimos la propuesta de apertura de juicio oral, y en esas estamos. No hay nada determinado al respecto.
-¿Cuáles son sus retos?
-Tenemos que buscar una estabilidad económica y la llegada de planes de empleo al municipio con la Diputación y la Junta de Andalucía, así como articular una buena participación pública, basada en la transparencia. Con la situación política que tenemos, con tres grandes fuerzas bastante equilibradas por número de concejales, es necesario buscar muchísimas líneas de consenso. Hay que buscar consenso y participación para que los puntos y acuerdos lleguen al Pleno con las mayorías necesarias para poder aprobarse.
-¿Cuál es la situación de cara al pago de las nóminas?
-Estoy a la espera de los informes de intervención. Estamos haciendo todos los esfuerzos para cumplir con los trabajadores.
-¿Cuáles son las principales medidas que se plantea para los primeros 100 días?
-Poner en exposición pública el Plan General de Ordenación Urbanística, que está aprobado inicialmente. También, en cuanto tome posesión el equipo de la Diputación Provincial, entablar contactos para la gestión de planes de empleo.
-La auditoría de cuentas que encargó el PP marcó buena parte del debate en la primera mitad del mandato anterior. ¿El PSOE también encargará otra para ver cómo se encuentra las cuentas?
-Con los informes que ya tuvimos, más la auditoría que hizo la Cámara de Cuentas de Andalucía que recomendaba la corrección de determinados errores, entiendo que es suficiente. Tenemos que mantener la austeridad y las medidas de ahorro sin dejar de prestar los servicios básicos.
-¿Pueden condicionarle alguna de las medidas ya tomadas por el PP en su etapa?
-Los planes de ajuste eran necesarios. No nos queda más remedio que ser austeros en el gasto, sin que por ello no se refuercen algunos departamentos. Algunas de las medidas que tomó el PP no nos gustaron, pero tomadas están. Intentaremos darle salida económica al Ayuntamiento sin que empeore su situación.
-Al asumir la Alcaldía, ¿deja usted de ser consejero delegado de Arcgisa?
-Inicialmente estoy compatibilizándolo, a la espera de que se constituya el nuevo gobierno de la Mancomunidad. Creo que las funciones son asumibles durante un periodo transitorio. Lo puedo sobrellevar.
-¿Seguirá cobrando de Arcgisa o se pondrá sueldo municipal?
-En este tiempo transitorio, de Arcgisa, pendiente del nuevo gobierno y lo que se decida.
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