![]() |
Foto: D. Calvente |
Ya hace tiempo que no sentia ese pequeño malestar, que te dejan las espinas de los chumbo cuando los pelaba.
Hoy he sentido ese malestar, pero merece la pena partirlos porque te recompensa el sabor de esta fruta.
En mi comarca ya no hay donde coger, las chumberas han muerto.
Estos es un regalo que me ha traido mi cuñado de las Alpujarra.
Estos es un regalo que me ha traido mi cuñado de las Alpujarra.
Domingo Calvente