Bellas coplas que apuntan alto
Apasionante batalla de pasodobles, tangos y cuplés en el inicio de los cuartos, con ‘OBDC La vida es bella!’, el coro de Faly Pastrana, el Canijo y Pepito Martínez como grandes destacadas en una función en la que ninguno desentonó
Se acabaron las coplas de fogueo. En cuartos hay que sacar la artillería, esto ya es ganar o morir (figuradamente hablando, por supuesto). En una función de gran nivel, las comparsas de Germán Rendón y Pepito Martínez, el coro de Faly Pastrana y la chirigota del Canijo afinaron la puntería y dieron un paso adelante en sus repertorios, los más completos de una noche en la que todos dieron la talla.
El primero en disparar fue el coro ‘Monopoly’, a gran nivel en letras aunque un poco por debajo de su primer pase en cuanto a interpretación. Destacaron sus tangos, el primero un emotivo homenaje al coro de la Viña y el segundo contra la violencia machista, una letra que puso en pie a gran parte del público. Las semis están caras, pero pueden estar más que orgullosos de su paso por el COAC 2016. Cada año dan un pasito más.
La batalla es dura en todas las modalidades, pero especialmente en comparsa. La primera en ofrecer su repertorio fue ‘Un país llamado Cádiz’, que mejoró en letras respecto a su primer pase. Pasodobles en busca de un acuerdo entre partidos para arreglar una España “que me da vergüenza” y para la situación de muchos jóvenes, obligados a buscarse la vida lejos de su ciudad y de sus familias. La calidad musical y vocal, incuestionable, les da muchas opciones de estar en la tercera ronda del Concurso.
'Los piratas informáticos' también elevaron el nivel de letras respecto a su debut, dedicando sus pasodobles a la propia modalidad, que nunca se perderá por mucho que las modas hayan dado un lugar prioritario a la comparsa, y al segundo puente, un gasto que consideran innecesario en una ciudad en la que mucha gente puede acabar, precisamente, “viviendo debajo de un puente”. Simpáticos cuplés y varias novedades en el popurrí en busca del pase.
Preparada para dar batalla llegó la comparsa de Germán Rendón, que golpeó con dos grandes pasodobles y un buen cuplé en busca de su primer pase a semifinales. Su primera letra fue para el machismo, que sigue presente en cada rincón de esta sociedad. La segunda, aún mejor, para combatir los tópicos que acusan a los gaditanos de flojos exponiendo la realidad de las quince personas que componen la propia comparsa. Un cuplé de arte a Aaron Ramsey (tema original, además) redondeó un repertorio de muchos kilates, empezando por una presentación que es difícil sacarse de la cabeza. Este, por fin, puede -y debe- ser su año.
Antes del descanso, turno para el humor de la mano del Canijo, que acertó en sus pasodobles a las absurdas disputas entre cargadores y costaleros y a los casos de pederastia en la iglesia, siempre desde el punto de vista del tipo. No desentonaron los cuplés, ambos mejor desarrollados que rematados. Destacó el segundo, a su obsesión por las comparsas, con buenos golpes intermedios (después de escuchar a ‘Los chatarra’ fueron al punto limpio a gritarle “olé”). El popurrí convence.
Tras el descanso, vuelta a Cádiz en 80 mundos con Faly Pastrana y su coro, una agrupación que aúna potencia y buen gusto en la interpretación. Dedicaron sus tangos a las mujeres “que hacen grande el Carnaval” y a los políticos que en el Congreso llevan años “chupando de la teta”, una letra desarrollada de forma brillante a partir de la imagen de Carolina Bescansa con su bebé en esa misma cámara. Buenos cuplés y magia vocal y musical en el popurrí. Su viaje continúa.
No está tan claro el pase de ‘El malo del cuento’, que agradó pero no terminó de enganchar. Dedicaron sus pasodobles a Podemos, que esperan no les traicione hoy como hizo el PSOE con la generación de sus padres, y a la dura historia de un hombre al que la que fue su mujer le ha arruinado la vida. Esta fue la famosa letra que motivó la salida de la comparsa del Soleta, un pasodoble con una temática difícil y un enfoque muy duro con la mujer de esa relación. El porcentaje de denuncias falsas es tan, tan bajo que sorprenden tantas letras en esta línea... El grupo lo defiende bien, pero la comparsa no termina de ser redonda.
Recta final de un día intenso. El teatro, algo frío (el llamado ‘síndrome de cuartos’), se animó gracias al humor y al compás chirigotero del Sheriff, que emocionó al respetable con dos pasodobles de categoría. El primero para un tipo de crucero muy diferente al suyo, el que afrontan los que cruzan el Estrecho en busca de una vida mejor. El segundo para la verdadera reina del Concurso, que no es la comparsa sino María la Hierbabuena, una letra sentida y escrita con el corazón. No despuntaron los cuplés, pero remontó un popurrí como siempre muy movido. Bajaron un poco respecto a su primer pase, pero salvo enorme sorpresa su crucero volverá en semifinales.
La ilusión de quince debutantes en esta fase despidió la primera sesión de los cuartos. Aunque su premio ya es estar aquí, los '¡Cazafantasmas!' no renunciaron a competir con buenas letras de pasodoble. El primero, desde el punto de vista de un joven que reprocha a su abuelo que haya hipotecado su futuro ayudando a perpetuar el bipartidismo y el segundo para la guerra entre oriente y occidente, un conflicto en el que ni los malos son tan malos ni los buenos tan buenos como nos quieren vender. Bien tratados ambos temas. Pasadas las tres de la madrugada finalizó la sesión, que no se hizo tan larga como otras más cortas en duración de las clasificatorias. Esto ya es otra cosa.
Leído en Diario de Cádiz