Hola , me llamo Joseph Merrick ( (Leicester, Inglaterra, 5 de agosto de 1862-Londres, 11 de abril de 1890) )
Si, yo soy el "John" Merrick de la película de David Lynch.
Yo soy El Hombre Elefante.
Erase un hombre a una deforme cabeza pegado.
Un freek mas de esta Parada de los Monstruos en que va derivando la vida.
Solo por mi aspecto se me trató como a un animal, como a una atracción de circo.
Humillado. Maltratado.
Hasta que descubrieron que "El Señor es mi pastor, y nada me faltará".
El Síndrome de Proteus es una enfermedad congénita así bautizada en honor del dios griego Proteo, el cual como si de de la Mistica de los X-Men se tratase podía cambiar de cuerpo, de forma.
Y esa es la enfermedad que yo padecía .
Al menos eso dijo el Dr. Michael Cohen en 1979.
Demasiado tarde , ya hacía 89 años que yo había fallecido.
Desde siempre este Teatro de las Pesadillas esta repleto de proteicos adoradores del Cambio.
De proteicos tertulianos con una baraja de opiniones para cada dondedigodigodigodiego.
De mutantes chaqueteros que saben arrimarse al buen árbol que mejor sombra les depare.
De camaleones que ya ni siquiera saben la piel que habitan.
Pero, aun, sigue habiendo muchos como yo , hombres elefantes , humillados , perseguidos, desplazados, arrinconados, aislados por su errata nature.
tiojimeno/aumor
Si, yo soy el "John" Merrick de la película de David Lynch.
Yo soy El Hombre Elefante.
Erase un hombre a una deforme cabeza pegado.
Un freek mas de esta Parada de los Monstruos en que va derivando la vida.
Solo por mi aspecto se me trató como a un animal, como a una atracción de circo.
Humillado. Maltratado.
Hasta que descubrieron que "El Señor es mi pastor, y nada me faltará".
El Síndrome de Proteus es una enfermedad congénita así bautizada en honor del dios griego Proteo, el cual como si de de la Mistica de los X-Men se tratase podía cambiar de cuerpo, de forma.
Y esa es la enfermedad que yo padecía .
Al menos eso dijo el Dr. Michael Cohen en 1979.
Demasiado tarde , ya hacía 89 años que yo había fallecido.
Desde siempre este Teatro de las Pesadillas esta repleto de proteicos adoradores del Cambio.
De proteicos tertulianos con una baraja de opiniones para cada dondedigodigodigodiego.
De mutantes chaqueteros que saben arrimarse al buen árbol que mejor sombra les depare.
De camaleones que ya ni siquiera saben la piel que habitan.
Pero, aun, sigue habiendo muchos como yo , hombres elefantes , humillados , perseguidos, desplazados, arrinconados, aislados por su errata nature.
tiojimeno/aumor
